Si tu PC con Windows 11 empezó a rendir peor en juegos tras las últimas actualizaciones, no eres el único: un cambio introducido por Microsoft ha provocado pérdidas de FPS y pequeñas ralentizaciones en determinados títulos cuando se usa una GPU de NVIDIA. La propia compañía verde ha reconocido el problema y ya tiene una respuesta técnica. Si quieres monitorizar el rendimiento en tu equipo, puedes usar herramientas integradas de Windows para comprobarlo.
Para atajarlo, NVIDIA ha publicado un controlador específico que actúa como remedio inmediato. Se trata del GeForce Hotfix 581.94, una revisión del paquete Game Ready 581.80, creada para revertir el bajón de rendimiento que muchos usuarios notaron justo después de instalar el parche acumulativo KB5066835 (y posteriores) en Windows 11. Además de aplicar el hotfix, conviene realizar tareas de mantenimiento como la limpieza de archivos temporales para asegurar un rendimiento más estable.
Qué ha pasado con KB5066835 y por qué afecta a los juegos
La actualización acumulativa de octubre para Windows 11, identificada como KB5066835, introdujo cambios de seguridad y en el núcleo del sistema que, como efecto colateral, impactaron en el rendimiento de algunos juegos con tarjetas gráficas GeForce. En los equipos afectados se observan FPS más bajos y microparones de fluidez, incluso sin caídas de fotogramas especialmente grandes. Revisa también el modo de energía Ultimate Performance si buscas maximizar la estabilidad en equipos de juego.
Más allá del gaming, este mismo parche arrastró otros fallos que han ido saliendo a la luz: problemas con localhost/IIS para desarrolladores, incidencias en el entorno de recuperación de Windows (WinRE) con teclados y ratones USB, advertencias de BitLocker pidiendo la clave de recuperación y ajustes de seguridad que desactivan el panel de vista previa en el Explorador para ciertos archivos. Aunque Microsoft ha ido corrigiendo algunos puntos en actualizaciones posteriores, el aspecto del rendimiento en juegos no recibió una solución inmediata por su parte.
NVIDIA lanza el GeForce Hotfix 581.94 para recuperar el rendimiento
Ante el escenario descrito, NVIDIA ha publicado un controlador Hotfix (v581.94) que, según su nota técnica, ajusta el comportamiento tras instalar KB5066835 (octubre) y su sucesor KB5068861 (noviembre). El objetivo es claro: restaurar el rendimiento en los juegos afectados en Windows 11 24H2 y 25H2 hasta que la corrección quede integrada en un paquete Game Ready con firma WHQL.
El 581.94 parte de los Game Ready 581.80 —que incluían optimizaciones para títulos como Call of Duty: Black Ops 7, Europa Universalis V o Anno 117—, pero añade la corrección específica para este conflicto con Windows 11. Se puede descargar como Hotfix independiente desde la web de NVIDIA y, si usas NVIDIA App y aún no estás en 581.80, puede que te pida instalar primero 581.80 y luego actualizar a 581.94.
A quién afecta, qué síntomas verás y qué dicen las pruebas
El problema se concentra en equipos con Windows 11 24H2 y 25H2 que recibieron KB5066835 o actualizaciones acumulativas equivalentes, y en los que se utiliza una GPU NVIDIA GeForce. Los síntomas más frecuentes son FPS inferiores a lo habitual, stuttering y, en algunos casos, cuelgues aleatorios en ciertos juegos. Hay informes que apuntan a que los títulos bajo DirectX 12 son los que más notan el impacto, con reportes de recortes del 10-20% en equipos con series RTX 40.
Tras instalar el Hotfix 581.94, múltiples usuarios han compartido resultados positivos. Pruebas difundidas en redes muestran mejoras muy significativas en juegos concretos: en Assassin’s Creed Shadows se han llegado a ver saltos de rendimiento de alrededor del 47% frente al 581.80, y otros testimonios hablan incluso de cifras superiores respecto a versiones más antiguas del driver. Conviene recordar que son datos anecdóticos y dependientes del equipo, pero ilustran que el parche funciona.
No todo son buenas noticias: algunos análisis señalan que, con 581.94, el consumo de recursos sube respecto a versiones previas. En una medición concreta, la potencia media de la GPU pasó de 37,6 W a 57,5 W, y la del procesador de 29,5 W a 31,7 W. Este incremento puede variar por juego y configuración, así que optimizar el rendimiento de Windows y revisar configuraciones puede ayudarte a equilibrar consumo y FPS.
Cómo saber si estás afectado y qué pasos dar
Antes de nada, confirma si tu sistema encaja en el perfil problemático. El conflicto se ha observado tras instalar KB5066835 (octubre) o KB5068861 (noviembre) en Windows 11 24H2/25H2. Puedes revisar tu compilación y el historial de actualizaciones con los siguientes pasos.
- Abre Configuración > Sistema > Acerca de y comprueba la compilación del SO (para 24H2/25H2, por ejemplo, 26100/26200 y superiores).
- Ve a Windows Update > Historial de actualizaciones y busca si están instaladas KB5066835 o KB5068861.
Si confirmas el escenario y notas bajada de rendimiento, procede así: instala el GeForce Hotfix 581.94 desde la web oficial de NVIDIA (o actualiza mediante NVIDIA App). Este driver no añade funciones nuevas: solo corrige el problema con Windows 11, por lo que es ideal como solución rápida.
Si no observas mejora o prefieres no usar un Hotfix, tienes alternativas. Puedes desinstalar temporalmente la actualización de Windows conflictiva desde Windows Update y pausar las descargas automáticas hasta 4 semanas para evitar que vuelva de inmediato. Otra opción es esperar a un Game Ready con WHQL que incluya el arreglo de forma definitiva.
Consejos prácticos para jugadores (España y resto de Europa)
Para minimizar sobresaltos, una buena práctica es aplicar un retraso a las actualizaciones de Windows en equipos de juego: espera unas semanas antes de instalarlas en tu PC principal y revisa si hay incidencias reportadas. En entornos de trabajo o estudio, especialmente si usas localhost/IIS o WinRE, conviene validar que todo funciona antes de actualizar masivamente.
Si no sufres caídas de FPS, puedes mantenerte en el driver WHQL estable y esperar a que NVIDIA integre la corrección en la siguiente versión firmada. Si sí te afecta, el Hotfix 581.94 es una solución rápida y eficaz para volver a la normalidad en títulos afectados, con la salvedad del posible aumento de consumo en algunos equipos.
En paralelo, mantén un ojo en las notas de Microsoft para Windows 11 24H2/25H2 y en el portal de NVIDIA, donde irán confirmando la disponibilidad del driver definitivo. Si tras actualizar sigues viendo tirones en juegos concretos (por ejemplo, CS2, Warframe u otros), revisa los foros oficiales y reporta tu caso: cuantos más datos tengan los fabricantes, antes llega la corrección fina.
La situación deja una lección conocida en el ecosistema PC: cuando el sistema y los drivers no evolucionan al mismo ritmo, pueden aparecer incompatibilidades. Con el Hotfix 581.94, NVIDIA mitiga el daño causado por la actualización de Windows 11 en el rendimiento de los juegos, mientras que los usuarios pueden optar por pausar updates, instalar el controlador de emergencia o esperar al próximo Game Ready con firma WHQL para normalizar por completo la experiencia.
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